¡Hola, chicas! ¿Qué tal el lunes?
Para empezar bien la semana, os traigo mi segunda y última propuesta de San Valentín. Se trata de una manicura más llamativa que la anterior, sólo apta para atrevidas.

Me he inspirado en este nail art de Farbmelodie. Obviamente el suyo es mucho más bonito y delicado que el mío.


Como esmaltes de base he utilizado el Wonderheart Bear de la colección Beauty Toys de Flormar que es un rosa chicle muy dulce y el nº 861 de la colección Red Icons de Deborah Milano que es un potente rojo anaranjado. Ambos tonos son muy vibrantes y combinan muy bien entre ellos logrando el perfecto color block que estaba tan de moda hace unas temporadas. ¡Estoy deseando que llegue la primavera para poder sacarles más partido!

Los corazones los hice con ayuda de la dotting tool. Aunque parezcan sencillos de pintar, en realidad no lo son. Me han quedado un poco toscos, cada uno de un tamaño diferente... ¡está visto que tengo que practicar más!